En los últimos años, más de 500 familias cusqueñas se han beneficiado con el proyecto de Cáritas denominado “Desarrollo agropecuario y medioambiental para mejorar la seguridad alimentaria, adecuarse y mitigar los efectos del Cambio Climático en el distrito de Ccatcca, provincia Quispicanchi. Cusco-Perú”. Tal iniciativa la ejecuta desde el 2016, Cáritas del Perú en alianza con Cáritas Cusco y con el apoyo de Cáritas Española.
La calidad de vida de las familias que viven en situación de pobreza en Cusco mejoró a través de la siembra y cosecha de agua, la forestación y reforestación, desarrollo agropecuario para la seguridad alimentaria y el fortalecimiento de capacidades de gobierno local y organizaciones sociales en contexto de cambio climático.
“El proyecto, junto con los pobladores de Ccatcca, implementaron la protección de los llamados ojos de agua, hoyos naturales por donde nace y emerge el recurso hídrico de origen subterráneo, a fin de mantenerlos a buen recaudo frente a los efectos de la erosión y de los animales”, explicó Percy Gonzales, Coordinador del proyecto.
A partir de los manantes protegidos (como se les conoce a los manantiales), el agua fue canalizada y acumulada en 12 reservorios construidos en diferentes comunidades, lográndose almacenar más de 630 metros cúbicos de este recurso, que sirvió para irrigar cerca de 80 hectáreas de tierras aptas para la producción agropecuaria. Este incremento hídrico se logró a través de 16 sistemas de riego implementados.
Respecto a la forestación y reforestación, se optó por las especies nativas ubicadas alrededor de los manantes, así como otras nativas y exóticas situadas a partir de los 4,000 m.s.n.m., las cuales además de evitar la erosión en laderas, se convierten en “captadoras” del agua de las lluvias, que finalmente emergerán a través de los ojos de agua en las zonas bajas. Hay más de 300,000 plantones sembrados de las especies nativas qeuña, qolle y chachacomo, y exóticas, principalmente pino; en una extensión mayor a las 200 hectáreas forestadas.
También, se buscó garantizar la seguridad alimentaria de las familias a través de la siembra de semilleros de especies como papa, haba y tarwi, con variedades resistentes al cambio climático. Asimismo, se promueve la instalación de pastos asociados (rye Grass + trebol), alimento nutritivo para la producción de carne y leche en diversas especies pecuarias (vacuno, ovino, cuyes, etc.).
Además, mediante la construcción de 40 fitotoldos o invernaderos, fue posible la producción de verduras. Estos, se convirtieron en un medio que permite complementar la dieta alimentaria a las familias de Ccatcca, mediante el consumo de hortalizas de alto valor nutricional, indispensables para contrarrestar los efectos de la deficiencia de hierro en los niños (anemia). Las principales especies cultivadas son acelga, lechuga, col, beterraga, entre otras.
Si desea conocer más del proyecto pueden ingresar a https://bit.ly/2W5CBil