Corpus Christi congregó miles de fieles en la Plaza de Armas de Trujillo

La Plaza de Armas de Trujillo volvió a ser escenario de una multitudinaria procesión como parte de la solemnidad del Corpus Christi (Cuerpo de Cristo en latín), que congregó la tarde del 20 de junio a miles de fieles unidos por la misma fe y devoción.

Gracias a la declaratoria de feriado no laborable, emitida por el Gobierno Regional de La Libertad, trabajadores públicos, alumnos de diversas instituciones educativas y familias enteras se fueron reuniendo desde muy temprano en esta parte de la ciudad para testimoniar públicamente su fe en la presencia viva y real de Cristo, presente en cuerpo, sangre, alma y divinidad, en la Santa Eucaristía.

Inclusive, 30 ex internos del penal El Milagro, entre varones y mujeres, que gozan de semilibertad participaron por primera vez con las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), de la celebración del Santísimo Sacramento, ofreciendo incluso, una alfombra como gratitud por las bendiciones recibidas.

Misa del Corpus Christi

La Solemne Misa del Corpus Christi fue presidida por el Arzobispo de Trujillo, Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana y Presidente del Consejo Episcopal Lationamericano (CELAM), Mons. Miguel Cabrejos, y concelebrada por su Obispo Auxiliar, Mons. Timoteo Solórzano, y sacerdotes de esta jurisdicción eclesiástica.

En su reflexión, Mons. Cabrejos recordó que en la Biblia “hay muchas preguntas de Dios, de Jesús y de interlocutores. Estas interrogantes y respuestas nos dan criterios de reflexión y actuación, porque nuestras decisiones no se pueden enviar al infinito, o como se dice, a dormir el sueño de los justos”.

“Las preguntas contenidas en la Biblia son vivas, son para todos los tiempos y son especialmente, hoy, para nuestra conciencia”, sostuvo.

“¿Dónde estás?, ¿Quién te ha dicho que estás desnudo? con la respuesta: La serpiente me sedujo y comí”, recordó el arzobispo, explicando que Adán no asumió su responsabilidad, sino que culpó a la serpiente, representación del espíritu del mal.

Igualmente, ejemplificó con la pregunta de Dios a Caín: “¿Dónde está Abel, tu hermano?, No sé; ¿soy yo el guardián de mi hermano? Caín tampoco se responsabiliza de su hermano. No le interesa”, relató el Arzobispo de Trujillo.

En otro pasaje, cita la interrogante de Jesús: “Y ustedes, ¿Quién dicen que soy yo? La respuesta de Pedro: “Tú eres el Mesías, el Hijo del Dios vivo”, contó Mons. Cabrejos.

Asimismo, el Presidente del Episcopado Peruano recordó que también hay preguntas de los interlocutores, que ojalá sean también nuestras preguntas:

“¡Queremos ver a Jesús! Esta es la tarea de la Iglesia, y para cumplir esto, es indispensable que vivamos la experiencia del apóstol Juan: “Lo que hemos visto y oído, les anunciamos, para que ustedes estén en comunión con nosotros”, remarcó.

Del mismo modo, citó la pregunta y respuesta: “Maestro, ¿qué tengo que hacer de bueno para obtener la vida eterna? Jesús responde: Anda, vende tus bienes, da el dinero a los pobres… y luego ven y sígueme”.

El Arzobispo de Trujillo sostuvo que todas estas preguntas, respuestas y afirmaciones en la Biblia, “nos sirven para tener conciencia y dejar que la palabra de Dios nos interpele hoy, porque lo eterno debe fecundar el tiempo temporal y lo infinito debe abrazar a la criatura concreta”.

Finalmente, preguntó a todos los presentes: ¿Qué tenemos que hacer nosotros?, a lo que aludió la respuesta del Papa Francisco: “Tomar el camino sinodal. Sinodalidad es caminar juntos, pastores, sacerdotes y fieles”.

“Así sea difícil, debemos de hacer el esfuerzo de caminar juntos en la historia, en la sociedad, en las responsabilidades, en el trabajo, en la familia, en los trabajos pastorales y en todo. Caminar juntos como Jesús caminaba con sus discípulos en Emaús”, propuso.

Procesión del Corpus

La celebración prosiguió con el recorrido procesional del Santísimo Sacramento, partiendo de la Basílica Catedral, en medio de un ambiente festivo con emotivas muestras fe y devoción a Cristo Eucaristía. 

Previo a la procesión, el perímetro de la Plaza de Armas de Trujillo fue embellecido con 39 coloridas alfombras y 20 arcos florales, ofrendados por las Vicarias de esta Arquidiócesis y diversas instituciones públicas y privadas, que adornaron el paso del Corpus Christi, glorificado con 28 imágenes de ángeles en variedad de tamaños. 

La celebración del Corpus Christi concluyó con la Solemne bendición Eucarística desde el altar principal, desde donde Mons. Cabrejos agradeció la presencia de los fieles y la colaboración de las autoridades locales y regionales, así como de las instituciones públicas, educativas y de las comisiones organizadoras, por unir esfuerzos y lograr concretar con éxito esta memorable celebración religiosa.

  • La Semana Eucarística concluye este domingo 23 de junio, con la celebración del Corpus Christi en cada parroquia de la Arquidiócesis de Trujillo.