- Eucaristía fue concelebrada por Mons. Carlos Castillo, Arzobispo de Lima; Mons. Reinaldo Naan, Obispo de Caravelí y presidente de Cáritas del Perú, y por el padre Guillermo Inca, Secretario General de la Conferencia Episcopal Peruana.
“Agradezco lo que han hecho, lo que hacen y lo que harán en nombre del cuerpo de Cristo para sanar las heridas del país”, señaló el señor Nuncio Apostólico en el Perú, Monseñor Paolo Rocco Gualtieri, durante la Santa Eucaristía concelebrada por Monseñor Carlos Castillo Mattasoglio, Arzobispo de Lima; Monseñor Reinaldo Naan, Obispo de Caravelí y presidente de Cáritas del Perú; y el padre Guillermo Inca Pereda, secretario general de la Conferencia Episcopal Peruana, a propósito de los 68 años de fundación de Cáritas del Perú.
Monseñor Rocco Gualtieri recordó que cuando presentó, el año pasado, sus credenciales a la presidenta Dina Boluarte y a la canciller Ana Cecilia Gervasi, ambas lo felicitaron por el trabajo de Cáritas en favor de los peruanos, particularmente en tiempos de pandemia. Este es un organismo de la glesia Católica promueve y lidera programas y proyectos de desarrollo humano integral en las poblaciones más pobres de nuestro país.
“He visitado muchas parroquias en los últimos meses y los sacerdotes me cuentan el gran apoyo de Cáritas. En este año, también, atendieron a cinco mil familias afectadas por el Yaku, yo les agradezco en nombre del Papa Francisco porque es un movimiento que viene de lo alto. En su marcha está la acción de la Iglesia que nos pide atender a los pobres, gratuitamente, sin esperar ser correspondidos”, añadió.
Un movimiento de amor que viene desde la cruz
Es un movimiento de amor, prosiguió el Nuncio Apostólico, que viene del Espíritu Santo y nos pide que nos convirtamos cada día. Debemos ser como los niños que ponen toda su confianza en Dios, reciben todo de él y miran a los demás para servirles gratuitamente.
“Ese es el sentimiento del Santo Padre quien pide que la Iglesia debe ser evangelizada para evangelizar. Cada día es un camino de renovación. En la cruz podemos contemplar el amor puro que es el amor crucificado. La caridad es el amor del crucificado”, concluyó.
Por su parte, Monseñor Reinaldo Naan, obispo de Caravelí y presidente de Cáritas del Perú felicitó y agradeció a los colaboradores porque “son ellos las manos de Cáritas. Han pasado muchas personas en estos 68 años con fidelidad a la opción preferencial por los pobres que es la Iglesia del Papa Francisco y les agradezco a cada uno por su esfuerzo. Cáritas transforma vidas y se pone al lado de los Cristos pequeños de hoy, por la Iglesia y para la Iglesia”, manifestó.
A su turno, Manuel Huapaya, secretario general de Cáritas, agradeció el saludo “que nos hizo llegar Monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, presidente de la Conferencia Episcopal Peruana y agradezco, también, el saludo de cada una de las Cáritas diocesanas”. Agradezco a los benefactores, a los presentes y a los que nos siguen virtualmente y a los beneficiarios que nos acercan el rostro de Cristo y nos permiten seguir en el camino de la Iglesia, concluyó.
