El último jueves por la tarde, el Santo Padre sostuvo una reunión con un grupo de cerca de 40 indígenas, entre participantes del Sínodo para la Amazonía y de otras iniciativas que se desarrollan en paralelo en Roma en estos días. En este encuentro también estuvo presente Monseñor Roque Paloschi, Arzobispo de Porto Velho, y el Cardenal Claudio Hummes, presidente de la REPAM.
Así lo informó el Director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Matteo Bruni, quien indicó que esta reunión inició con un breve discurso leído por una mujer y un hombre. Ambos, en representación de los pueblos indígenas, agradecieron al Papa Francisco la convocatoria del Sínodo y pidieron ayuda para hacer realidad su deseo de asegurar una vida pacífica y feliz a sus pueblos, cuidando su tierra y protegiendo sus aguas, para que las puedan disfrutar sus descendientes.
Por su parte, el Santo Padre dirigió unas palabras a los presentes, subrayando que el Evangelio es como una semilla que cae en la tierra y crece con las características de esta tierra. En otro momento, reiteró que el Evangelio debe inculturarse, porque “la gente recibe el anuncio de Jesús con su propia cultura”.