El Papa Francisco cumple 83 años y en su día, se reproducen incontables saludos que llegan desde todos los rincones del mundo. Asimismo, es el séptimo año que celebra como la autoridad máxima de la iglesia católica, con lo cual Bergoglio atraviesa una fecha clave que tiene otro motivo de festejo: los 50 años de sacerdocio que acaba de cumplir el pasado 13 de diciembre primero en Argentina y luego en todos los continentes.
Según Vatican News, “miles de correos electrónicos fueron enviados por los fieles a la dirección de mail puesta a disposición para la ocasión, tantos como las cartas de los niños. Millones de personas, por otra parte, han elegido las redes sociales para enviarle sus pensamientos, incluso solo con un comentario bajo una foto suya publicada en Franciscus, la cuenta oficial de Instagram”. Entre los dones más apreciados, sin duda, está la respuesta mundial a sus constantes peticiones de oración por su magisterio y por esa “vejez”, sede de sabiduría, que durante la Misa con los cardenales el 17 de diciembre de 2016, esperaba que fuera “tranquila, religiosa, fecunda y gozosa”.
El diseño del Espíritu
Jorge Mario Bergoglio nació en Buenos Aires, Argentina, en 1936. Hijo de emigrantes piamonteses, tiene pasión por la música, en particular por la Ópera, que sigue en la radio el sábado por la mañana con la Madre Regina y sus hermanos, y en su sangre el amor por el fútbol, aunque en los juegos con los amigos a menudo termina en el arco, un papel que se le asigna al “pata dura”, a los que como él mismo explicará más tarde, “no tienen el pie educado”.
Estudió mucho, aprende varios oficios y luego se graduó como técnico químico, pero el horizonte de su vida era diferente: consagrarse a Dios y ponerse al servicio del pueblo, así que en 1958 entró en el seminario y optó por realizar su noviciado entre los Padres Jesuitas.
El sacerdocio
En 1969 fue ordenado sacerdote. Ese día, su abuela Rosa le entregó una carta, dirigida a todos sus nietos. En 1973 fue nombrado provincial de los jesuitas de Argentina. En 1992 recibió la ordenación episcopal y el 28 de febrero de 1998 fue nombrado arzobispo de Buenos Aires, primado de Argentina. En el consistorio del 21 de febrero de 2001, Juan Pablo II lo creó Cardenal. “Esta mañana – declaró el Papa Wojtyla en esa ocasión – la Roma “católica” estrecha a los nuevos cardenales en un cordial abrazo, convencida de que se está escribiendo otra página significativa de su historia bimilenaria”.
El Papa de las Américas
Es el preludio de otro evento destinado a dejar su huella: el 13 de marzo de 2013 Jorge Mario es el primer Papa venido de las Américas, el primer jesuita, el primero en elegir el nombre de Francisco, como el Santo de Asís que tuvo como amigos a los pobres, los últimos, los enfermos, las criaturas de la Tierra, la Hermana Luna y el Hermano Sol y paz del corazón entre hombres y naciones.